Entonces él se preguntó, porque su dios lo puso ahí…
Porque él es fuerte…
Y el otro guerrero es débil…
Fue cuando comprendió muchas cosas, muchas de sus cualidades…
Entendió el porque de las cosas…
Sabía su misión y su destino, pero no sabía el camino…
Aún así, seguía estando seguro de sus cualidades…
Sabía como podía usarlas para bien, y también sabía como usarlas para mal…
Él tuvo muchas batallas en el pasado que lo fortalecieron…
Sin embargo, pareciera que el otro guerrero se debilitó más con cada batalla que luchó…
Él estaba ahí para ayudar a ese otro guerrero, que toda esperanza había perdido…
Eran escasas las veces que el otro guerrero le contaba las batallas perdidas, las estrategias utilizadas, describía el campo de batalla, y él comprendía…
Llegó el día en el que el otro guerrero, sin darse cuenta de hacerlo, reveló el secreto de su debilidad…
Él sabía que era fuerte, muy pocas veces lo decía, por miedo a caer en el egocentrismo. [Mismo que caracterizaba a los conquistadores españoles]
Con Tenochtitlan bajo el poder español, el destino cerró la puerta de su hogar, abriendo la puerta de la incertidumbre…
2 comentarios:
Mera literatura salida de inspiracion de calidad y no mamadas =)
Una amiga mia leyo tu blog y penso q estabas en mi generacion de la carrera, lol.
Por eso me caes bien Isaiaiaaaas!!!
Te veo pronto!! [espero =)]
Por su pollo q andas bien inspirado Isaias,,,, q ondaaah,sacaste a los guerreros del pasado y todo..
si.. inspiracion..
me da gusto.
nos leemos, compa;ero!
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