25.12.08

a jugar a los números

Dos, tres y cuatro melodías, un papel le quita lo fashion a mi suelo. Lo levanto y me acuerdo de las navidades hace nueve años que me hacían eternas las noches y hoy se me pasan cual agua entre mis dedos. Ni tengo ganas de escribir bien, hace mucho que no, pero el whisky trae recuerdos, promesas, y reglas ortográficas que no puedo ignorar. Me gustan los puntos. Las comas también pero más los puntos en esta oración haré como que las comas no existen no no me siento bien escribiendo así porque me gustan las comas y no me gusta olvidarlas cuando escribo.
Soniditos láser perdidos en una cueva húmeda, gotas de taurina cayendo al suelo, a mi suelo fashion lleno de moho y rostros que desconozco pero me sonríen. Pura formalidad; como los puntos y las comas. Voy al bote de basura y un regalo ahí; tiro el papel. Cables en la pared, en el teclado donde escribo, tras la pantalla, en mis venas conectados directamente al mundo donde mi sangre fluye ahora pintándolo de rojo vino y, no, en realidad es un color que no tiene nombre aún. Chao mundo, me voy a dormir.

1 comentario:

Anónimo dijo...

casate conmigo te amo